Niurka Marcos recientemente se pronunció tras ser cuestionada por los medios de comunicación sobre la presunta recaída del actor Rafael Amaya en sus adicciones al alcohol y las drogas. Lejos de criticarlo, la vedette cubana defendió a su colega de cualquier tipo de señalamiento sobre la difícil situación que vive en el ámbito personal.
“Pobrecito, hay que apoyarlo. A él no le puedo decir nada porque no está en sus cinco sentidos, sólo le pido a toda la gente que lo rodea y a los medios que en vez de aplastarlo y desprestigiarlo, entre todos lo ayudemos”, mencionó Marcos.
“Esas personas no son delincuentes, esas personas están enfermitas y necesitan de nuestra ayuda. Vamos a darle la ayuda a Rafa si la necesita, no lo jod… Al contrario, ayudemos entre todos a levantarse y a que siga caminando adelante”, agregó la actriz.
Al referirse a los detractores de Rafael Amaya, la también cantante destacó: “Me despierta tanta ira la gente tan enferma, mediocre y desgraciada que trata de hacer leña del árbol caído. Quisiera que en un tronar de dedos ellos estuvieran viviendo y sufriendo exactamente lo que está experimentando esa persona que están criticando”.
Las palabras de Niurka Marcos en solidaridad con Amaya llegan después de un vídeo que fue publicado por la revista mexicana TV Notas en donde el actor presuntamente estaba viviendo “delirios de persecución” como consecuencia de una recaída en sus adicciones.
La publicación mexicana señaló que el afamado intérprete había presentado una recaída a escasos tres meses de haber sido dado de alta de una clínica de rehabilitación en México.
En el clip que fue dado a conocer por TV Notas, Rafael Amaya se mostraba muy preocupado mientras deambulaba por las calles de Tijuana en México durante altas horas de la madrugada tras presuntamente haber sido víctima de una persecución por unos sujetos que “intentaban secuestrarlo”.
En el mes de diciembre de 2020, Amaya confesó públicamente que durante los últimos meses había batallado en contra de sus adicciones al alcohol y las drogas, una agridulce experiencia que lo obligó a separarse por completo de sus seres queridos y del amor tan grande que sentía por la industria de la actuación.
“Perdí mi paz interior, el amor que le tenía a mi familia, a mi trabajo. Poco a poco me fui sumergiendo en el fango oscuro del alcohol y las drogas, viviendo todos los excesos posibles habidos y por haber”, puntualizó el galán de telenovelas en una revista con People en Español.
Pocos días después de las mediáticas declaraciones de Rafael Amaya a la publicación estadounidense, diversos medios de comunicación reportaron que el actor ya había sido dado de alta de un centro de rehabilitación en México después de haber completado su proceso de sanación.
En la actualidad, el equipo de trabajo de Amaya no ha emitido ningún comunicado para poner fin a las constantes especulaciones por parte de la prensa mexicana sobre una posible recaída del artista en sus adicciones al alcohol y las drogas.
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