El Chapo tenía 6 años de fugitivo, cuando empezó a enamorar a Coronel. "Me conquisto su platica. No me llevaba grandes regalos. Él se gana a las personas con su forma de ser. Él actua como cualquier persona normal, es amable, platica y come lo que sea. No me consta que trafique drogas", dijo Coronel a Telemundo. "[El Chapo] es un hombre muy cariñoso y expresivo".