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Esther Callejas, una joven mujer de Phoenix, Arizona, fue arrestada el último lunes luego de dispararle con un arma a sus dos hijos, de los cuales una niña murió poco después del ataque y un niño permanece internado en estado crítico, según informaron fuentes policiales a cargo del caso.
Según informó la sargento Ann Justus, portavoz del Departamento de Policía de Phoenix, Callejas, de 24 años, protagonizó el tiroteo en su casa, ubicada cerca de la calle Seventh Street y Broadway Road, alrededor de las 11:45 am del último lunes, señala The Arizona Republic.
El mismo medio detalla que los agentes respondieron a las llamadas de vecinos que reportaban el tiroteo, y al llegar al domicilio antes mencionado encontraron a una niña de 2 años y un niño de 6 años, ambos con heridas de bala.
Si bien los efectivos policiales practicaron maniobras para salvarle la vida, la niña fue declarada muerta en el hospital local adonde fue trasladada. Por su parte, el hermanito permanecía en estado crítico hasta este miércoles, reporta el medio antes citado.
“Como puede imaginar, este es el peor tipo de llamada que podemos realizar como oficiales”, dijo Justus a los periodistas locales. Y agregó: “Afecta a todos y cada uno de nuestros oficiales”.
Antes de disparar contra sus dos hijos, Esther Callejas le dijo a su familia que estaba deprimida
Según consta en documentos judiciales consignados por The Arizona Republic, Callejas habló con familiares antes de llevar a cabo el brutal ataque contra sus dos hijos y les dijo que atravesaba un periodo de depresión.
Durante una entrevista con la policía de Phoenix, Callejas reveló que tenía la intención de disparar a sus dos hijos y luego suicidarse.
La mujer compró una pistola y se la ocultó a su esposo, Emmanuel Isidro.
Isidro explicó a los detectives que su esposa había indicado que estaba deprimida recientemente, antes de que ocurriera el homicidio de su niña y herir a su niño. En consecuencia, el hombre llevó a Callejas al médico, donde recibió un medicamento contra la depresión que supuso se estaba tomando a diario.
Callejas confesó ante la Policía que les disparó a sus dos hijos porque quería “que fueran al cielo”
Callejas le dijo a la policía que decidió el lunes por la mañana que dispararía a sus hijos con la pistola y luego se pegaría un tiro, según el expediente policial. También consta que les dijo a sus hijos que quería que fueran al cielo.
La mujer disparó el arma una vez para ver si funcionaba correctamente, y disparó su mano izquierda por accidente.
Su hijo de 6 años corrió hacia la puerta cuando ella le disparó a él y a su hermana de 2 años, Esperanza Isidro, quien luego fue declarada muerta en el hospital. El documento decía que Callejas no recordaba cuántas veces les disparó.
Callejas fue ingresada en una cárcel del condado de Maricopa bajo sospecha de dos cargos de homicidio, y está detenida con una fianza de 2 millones de dólares, según los registros penitenciarios.
Está programado que la mujer comparezca ante el tribunal nuevamente el 5 de octubre.
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