Los adultos con resultados positivo en la prueba del SARS-CoV-2 tenían aproximadamente el doble de probabilidades de haber comido en un restaurante, que aquellos con resultados negativos en la prueba del SARS-CoV-2.
Los adultos con resultados positivo en la prueba del SARS-CoV-2 tenían aproximadamente el doble de probabilidades de haber comido en un restaurante, que aquellos con resultados negativos en la prueba del SARS-CoV-2.